15 Ιουλίου 2006

BEATUS ILLE. Horacio, Epodo II

'Beatus ille qui procul negotiis,
ut prisca gens mortalium,
paterna rura bubus exercet suis
solutus omni faenore
neque excitatur classico miles truci
neque horret iratum mare
forumque vitat et superba civium
potentiorum limina.
ergo aut adulta vitium propagine
altas maritat populos
aut in reducta valle mugientium
prospectat errantis greges
inutilisque falce ramos amputans
feliciores inserit
aut pressa puris mella condit amphoris
aut tondet infirmas ovis.
vel cum decorum mitibus pomis caput
Autumnus agris extulit,
ut gaudet insitiva decerpens pira
certantem et uvam purpurae,
qua muneretur te, Priape, et te, pater
Silvane, tutor finium.
libet iacere modo sub antiqua ilice,
modo in tenaci gramine:
labuntur altis interim ripis aquae,
queruntur in Silvis aves
frondesque lymphis obstrepunt manantibus,
somnos quod invitet levis.
at cum tonantis annus hibernus Iovis
imbris nivisque conparat,
aut trudit acris hinc et hinc multa cane
apros in obstantis plagas
aut amite levi rara tendit retia
turdis edacibus dolos
pavidumque leporem et advenam laqueo gruem
iucunda captat praemia.
quis non malarum quas amor curas habet
haec inter obliviscitur?
quodsi pudica mulier in partem iuvet
domum atque dulcis liberos,
Sabina qualis aut perusta Solibus
pernicis uxor Apuli,
sacrum vetustis exstruat lignis focum
lassi Sub adventum viri
claudensque textis cratibus laetum pecus
distenta siccet ubera
et horna dulci vina promens dolio
dapes inemptas adparet:
non me Lucrina iuverint conchylia
magisve rhombus aut scari,
siquos Eois intonata fluctibus
hiems ad hoc vertat mare,
non Afra avis descendat in ventrem meum,
non attagen Ionicus
iucundior quam lecta de pinguissimis
oliva ramis arborum
aut herba lapathi prata amantis et gravi
malvae salubres corpori
vel agna festis caesa Terminalibus
vel haedus ereptus lupo.
has inter epulas ut iuvat pastas ovis
videre properantis domum,
videre fessos vomerem inversum boves
collo trahentis languido
positosque vernas, ditis examen domus,
circum renidentis Laris.
'haec ubi locutus faenerator Alfius,
iam iam futurus rusticus,
omnem redegit idibus pecuniam,
quaerit kalendis ponere.


Traduce Fray Luis de León de esta manera el ideal epicúreo de la sobriedad y la austeridad:

Dichoso el que de pleitos alejado,
cual los del tiempo antigo,
labra sus heredades, no obligado
al logrero enemigo.

Ni la arma en los reales le despierta,
ni tiembla en la mar brava;
huye la plaza y la soberbia puerta
de la ambición esclava.

Su gusto es, o poner la vid crecida
al álamo ayuntada,
contemplar cuál pace, desparcida,
el valle su vacada.

Ya poda el ramo inútil, o ya enjiere
en su vez el extraño;
castra sus colmenas, o si quiere,
tresquila su rebaño.

Pues cuando el padre Otoño muestra fuera
la su frente galana,
con cuánto gozo coge la alta pera,
las uvas como grana.

Y a ti, sacro Silvano, las presenta,
que guardas el ejido,
debajo un roble antiguo ya se asienta,
ya en el prado florido.

El agua en las acequias corre, y cantan
los pájaros sin dueño;
las fuentes al murmullo que levantan,
despiertan dulce sueño.

Y ya que el año cubre campos y cerros
con nieve y con heladas,
o lanza el jabalí con muchos perros
en las redes paradas;

o los golosos tordos, o con liga
o con red engañosa,
o la extranjera grulla en lazo obliga,
que es presa deleitosa.

Con esto, ¿quién del pecho no desprende
cuanto en amor se pasa?
¿Pues qué, si la mujer honesta atiende
los hijos y la casa?

Cual hace la sabina o la calabresa
de andar al sol tostada,
y ya que viene el amo enciende apriesa
la leña no mojada.

Y ataja entre los zarzos los ganados,
y los ordeña luego,
y pone mil manjares no comprados,
y el vino como fuego.

No me serán los rombos más sabrosos,
ni las ostras, ni el mero,
si algunos con levantes furiosos
nos da el invierno fiero.

Veamos ahora cómo ha influido este tópico horaciano en diferentes autores contemporáneos:

LUIS ANTONIO DE VILLENA, Hymnica

Bajo el aura del duro sol primero
y el trino inaugurado de los pájaros,
abandonar el hogar tras el almuerzo,
en el breve calor que adelanta el verano.
No ir, si tenías que ir a lugar convenido,
ni entrar en clase, aunque el estudio importe,
ni salir hoy a comprar cosas determinadas...
Ponerse a caminar, con el amigo cómplice,
que huye también la tarde, por la cuesta abajo,
hacia la hierba y los pinos, solitarios...
Tenderse allí y hablar del duro otoño,
ya pasado, mientras invita el sol a retirarse
ropa, y molestan los insectos renovados.
Y allí dejar pasar las horas insensiblemente,
entre calor y vaho de flores, dormitando.
Se charlará despacio, y surgirá el silencio.
Y si el sexo incomoda alegremente, no habrá
sorpresa. Es huésped esperado y cotidiano...
Por lo demás, amodorrarse allí, vivir al sol,
dejar pasar el tiempo y olvidarse de todo.
Que ya sabes el verso: Dichoso el que de pleitos
alejado.

Como véis, Luis Antonio de Villena cita a Horacio a través de Fray Luis, y además, cambia el punto de vista, es mucho más romántico antes que epicúreo.

Arturo Dávila, poeta mexicano nacido en 1958, creador de una compilación poética llamada, con gracia y estilo, Catulinarias, remitiéndose al tan famoso poeta citado este mes en multitud de blog, nos ofrece este bello poema en el que se dirige directamente al propio Horacio.

Dichoso aquél, Horacio,
que huye del mundanal ruido
(y del tráfico
y del smog)
y, lejos de los negocios de la poesía,
se dedica (como aconseja Voltaire)
a cultivar su jardín.
Y a hacer el amor a una mujer callada,
y a desayunar frutas con té de menta,
y a practicar yoga al atardecer,
y a ver, tras la ventana azul,
el mar
que siempre nace
y nunca muere.

Cita al famoso jardín, y mezcla los ideales epicureístas con ideales ecologistas, naturistas, de su época hippy. Al final, lo mejor es el mar, la contemplación del inmenso infinito, la contemplación serena de lo que perdura, la naturalidad.

Por último, cabe citar un poema más, demostrando que poetas anteriores a Horacio, como el poeta espartano arcaico Alcmán, ya tenían en sus pensamientos el Beatus ille.

Feliz aquel que puede alegremente
cumplir un día sin lágrimas.

Qué lástima de pesimismo arcaico...

6 σχόλια:

Esther είπε...

Mertxu, tú si que sabes de referentes. Por cierto, el poema de Luis Antonio de Villena, no se ve demasiado bien por el color.
¡AH!, el día de las adjudicaciones quedaremos para comer donde siempre ¿no?, Javi ya lo sabe, Ana también ( ya se que comereis también allí al día anterior, os harán socias vitalicias...), a Isra hay que decírselo ¡ Isra, el día 26 tienes una cita con la secta!.Ya me direis algo.
Un saludito.

Esther είπε...

¡Pero bueno, qué chulada, si sale la fecha en griego...!
Sois los reyes de los blogsssssssss.

Javi είπε...

Esther que lo he puesto yo jo... yo que me he esmerado releyendo a Luis Antonio de Villena, que por cierto, me gusta más bien poco... En fin, eso Mertxu que en las adjudicaciones nos vemos para comer

Esther είπε...

Perdón, perdón, Javi, ahora me he dado cuenta que tu nombre sale al final, pero es que esto de los blogs compartidos, todavía como que se me escapa un poco...
¡ Vale! ¡Pues tú también sabes de referentes!
Ya veo que después de una semanita sin tocar el ordenador, ahora te has puesto las pilas.
La verdad es que este poema de Horacio, además de ser muy famoso, es uno de mis preferidos ¡ No podía faltar!
Bueno, el que sea o la que sea, ya me explicará eso de la fecha en griego.
Un saludo a todos.

caludio eliano είπε...

CHICOS Y CHICAS: QUEDAMOS EL 26 SIN PROBLEMAS. ESTHER, A VER CUANDO TE UNES A LA SECTA( TE HE ENVIADO LA INVITACIÓN). JAVI: LOS COLORES CLARITOS ( A MI ME PASO LO MISMO) Y MUY BIEN POR ESE TRABAJO. ES ESTUPENDO SEÑOR FUNCIONARIO: SE ME ESTÁ OCURRIENDO UNA IDEA......

Ανώνυμος είπε...

Jajaja, acabo de leer que este post tiene como 3 años de antigüedad, pero creo que nunca es tarde para informar algo. Dentro de los poemas que aluden al épodo de Horacio cabe señalar el pomea del poeta Manuel José Othón "Beatus ille".

PD. Lástima que no sé leer griego, pues en verdad que me está costando trabajo hacer el repost